- Publicidad -spot_img

El Diario de Tiata, una joya literaria sobre los artesanos oaxaqueños

Uno de los encantos literarios que trajo la pandemia por el Covid-19 es la revista El Diario de Tiata, que fue presentado en días recientes. Una colección de 12 episodios, cada uno dedicado a uno de los grandes maestros del arte popular de Oaxaca.

Tiata es una niña que vive en Pinotepa de don Luis. Su papá, vendedor de tinta de caracol, la lleva a sus viajes comerciales, ahí conoce a los artistas, ya que éstos utilizan estas tintas.

Hija de madre mixteca y papá afrodescendiente, Tiana sueña con ser artista, así que aprovecha la oportunidad para entrevistas a los artistas, de quien espera encontrar el secreto que le ayudará a cumplir su sueño.

Tiata, es una palabra en Mixteco que se refiere a la flor del árbol de Carolina, una planta ornamental y medicinal, conocida también como coquito, clavellina, cabellos de ángel, cocuche, mocoque, guietiqui, itayata, amapolo, se utiliza en la costa oaxaqueña como adorno, forman con collar con esta flor para honrar a las personalidades importantes.

Es Tiata y sus apuntes, la que llevará el hilo de estas historias, con la que se pretende difundir el arte y la cultura de Oaxaca.

Con la pandemia y el cierre de fronteras, los artesanos dejaron de percibir hasta el 80 por ciento de sus ingresos, así que uno de los proyectos del Instituto de Intercambios Culturales y Educativos de México AC para apoyarlos es esta caricatura cultural.

El artista plástico José Luis García Cruz, es el que se encarga del dibujo. Retoma la historieta, al recordar aquellos años en que se aprendió a leer con ella, ya que, a pesar de la tecnología, sigue siendo un ícono de la cultura popular.

El primer número se lo dedican a don José García Antonio, conocido como “El Señor de las Sirenas” y su esposa doña Teresita de Jesús, del taller Manos que ven.

Originario de San Antonino Castillo Velasco, el artesano trabaja con barro. Las sirenas son su sello personal y ha cautivado al mundo entero con su arte.

Hace más de dos décadas perdió la vista por el glaucoma, pero eso no le impidió seguir con su actividad, su esposa, también artesana, es quien afina los detalles.

Tiara le pregunta a don José cómo vive, cómo soy, como empezó a trabajar, como continúa pese a su discapacidad.

Se tiene contemplado en las próximas ediciones a homenajear al maestro Isaac Vásquez, de Teotitlán del Valle, también multi galardonado en el país y en el mundo. Junto con Rufino Tamayo y Francisco Toledo empezaron un estudio para recobrar los colores naturales.

Está Teodora Blanco, pionera en utilizar el barro utilitario de Atzompa para algo decorativo con la técnica del pastillaje. Manuel Jiménez, creador de las tallas de madera en Arrazola, conocidos ahora como alebrijes. Olegario Hernández quien recuperó las técnicas de calado de jícara, Carlo Magno, quien contribuyó a que el barro negro llegue a otros continentes, o las hermanas Navarro de Santo Tomás Jalietza.

Una edición de colección, ya que sólo se imprimieron mil ejemplares. Definitivamente una joya para los amantes de la cultura oaxaqueña.

- Publicidad -spot_img
- Publicidad -spot_img
- Publicidad -spot_img

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Recientes