Durazno, fresa, nuez, cajeta o membrillo, son algunas de las frutas de la región en la Sierra Sur utilizados para los compuestos Doña Concha.
Los compuestos es un licor elaborado con el destilado más puro de caña de la región para dar origen esta bebida que forma parte de la cultura gastronómica en Putla Villa de Guerrero.
Antonia Mejía Camacho, heredera de la tradición, nos contó que se llaman Concha en memoria de su hermana.
Una vez que el aguardiente de caña se pone en añejamiento, las frutas son colocadas de manera directa, con azúcar, sin conservadores.
Se trata de una bebida utilizada desde hace varios siglos como remedio medicinal con ruda, cedrón, coyote, anís o yerbabuena.
En Putla se saborea también de guanábana, tamarindo, jamaica, maracuyá, capulín, nescafé, zarzamora, uva, membrillo, nanche, chabacano, manzana, piña, durazno, puñuela, guayaba, fresa, nuez, cacahuate, coco, café, mamey, cajeta, membrillo, tejocote, o piña colada.
Ubicado entre la Costa y la Mixteca, Putla Villa de Guerrero brilla en lo alto de la Sierra Sur, rodeado de cerros y montañas, con ríos abundantes.
Al entrar te encuentras el letrero que anuncia los compuestos, con ese sinfín de sabores que son sinónimo de la alegría que se vive en Putla, un rincón de Oaxaca con una vasta gastronomía, flora y fauna, de fiestas coloridas y tradiciones arraigadas.
Y sin duda, una tradición al llegar a Putla es beber un compuesto con mucho sabor y magia.
