Al viajar a la costa oaxaqueña una parada obligada en San José del Pacífico. Ahí tuvimos la experiencia de probar la comida regional con ingredientes nativos.
El restaurante se llama Rayito de Sol, está ubicado en la Carretera Internacional 175 S/N. Es uno de los comedores más arraigados. Abrió sus puertas en 1963 y desde entonces, se mantiene en el gusto de los visitantes.
Sus platillos tienen ese calor de hogar. Sabores que te hacen volver a personas, lugares o tiempos entrañables. Tan sólo para empezar te ofrecerán una taza de café que producen en esa tierra, o chocolate, si prefieres algo más dulce, con pan horneado en el pueblo.
Ocupan ingredientes que se dan en esta zona de la sierra oaxaqueña; entre sus especialidades está la sopa de hongos, el alambre de tasajo y los champiñones rellenos con tocino y queso.
El sazón serrano es especial, al tratarse de un hábitat frío por excelencia, vuelven la comida cálida, muestra intimidad y atención en cada platillo.
Los comensales se sienten cómodos en este rincón, justo enfrente, venden souvenirs si quieres un recuerdo de tan emblemático rincón. Un lugar mágico, atractivo e ideal para el descanso.
Rayito del Sol abre desde temprano, a las 7 de la mañana y cierran hasta las 23 horas. Otra virtud es que tienen servicio a domicilio, si decidiste rentar una de las cabañas, así que puedes llamar al 951 135 1747.
Siempre es valioso encontrar iniciativas locales, donde se crea una comunidad y que te permite pertenecer, aun a través de la comida, a este espacio tan maravilloso.