♦ Yolanda Peach | Leche con tuna
En una velada excepcional, La Distral en el Hotel Grand Fiesta Americana Oaxaca presentó su nuevo menú en honor a su cuarto aniversario. Este evento exclusivo reunió a diversas personalidades para celebrar la alta gastronomía oaxaqueña fusionada con la tradición mexicana en un ambiente que refleja la esencia del grill y la mezcalería.
La noche inició con la calurosa bienvenida de Mari Paz Martínez Iturribarria, Gerente General del hotel, quien expresó su gratitud por la lealtad y preferencia de los comensales a lo largo de estos cuatro años.
La experiencia gastronómica comenzó con una res curada, donde el filete de res curado se fusionó magistralmente con las lajas de queso de cabra y la emulsión de chilhuacle. Este exquisito platillo fue maridado con el vino Casa Madero V rosado y Chiraz Parras de la Fuente, Coahuila, creando una armonía de sabores que anticipaba una noche memorable.
La siguiente delicia fue la tlayuda rota, que combinó camarón, mayonesa de habanero, frijol con hoja santa, queso fresco y cremoso de aguacate. Acompañada por el vino Llano Colorado, lágrimas, Chardonnay Valle de San Vicente, esta creación resaltó la creatividad y maestría de los chefs.
El tercer tiempo fue una sopa de guías, una tradicional preparación oaxaqueña que cautivó con la combinación de guías de calabaza, elotito baby y su maridaje con la cerveza artesanal Colimita Laguer, realzando los sabores regionales.
El plato fuerte fue unos Bracitos asados, donde el pulpo causa de chile manzano, chimichurri de epazote y poro frito se fusionaron magistralmente. Acompañado por el vino Monte Xanic, Calixa blend, tempranillo, merlot, cabernet Sauvignon, Valle Ojos Negros.
El tamal oaxaqueño fue otro punto culminante de la noche, con mole negro, dzic de res, aceite de trufa blanca y cilantro criollo, maridado con el vino El Cielo Galileo tempranillo, Valle de Guadalupe.
El festín culminó con un Pork Belly, cuya salsa de chilhuacle con calabaza negra, esquites y polvo de camarón lo convirtieron en una experiencia gastronómica única. El acompañamiento de un vino monte Xanic selección, Malbec Merlot, Cabernet Sauvignon Valle de Guadalupe, completó este último acto de sabor y elegancia.
El cierre de esta experiencia culinaria fue un Brule de arroz, una tarta cremosa de arroz con leche, servida con helado hecho en casa de macadamia y vainilla. Este postre exquisito se maridó con un vino Valleformosa, Cava semiseco, brindando un final dulce y memorable a la noche de sabores intensos.
En esta cena exclusiva, los chefs Gerardo Rivera y Ovidio Pérez brillaron con su creatividad y maestría culinaria, en la que se reafirmó su compromiso con la innovación gastronómica y la promoción de los sabores auténticos de la región.
Gerardo Rivera, chef corporativo de Grupo Posadas, aportó su genialidad culinaria con cada platillo, mostrando su dominio en la fusión de sabores tradicionales y técnicas innovadoras. Su trayectoria de más de 36 años en la gastronomía mexicana le ha valido reconocimientos y premios que respaldan su excelencia en el arte de la cocina.
Por su parte, Ovidio Pérez, chef ejecutivo de La Distral Oaxaca, demostró su pasión por la cocina oaxaqueña y la herencia cultural que la acompaña. Su dedicación y talento lo han llevado a destacar en el ámbito gastronómico nacional e internacional, siendo un embajador de la cocina oaxaqueña.
La celebración no solo honró el aniversario de La Distral, sino que reafirmó el compromiso del Grand Fiesta Americana Oaxaca con la excelencia culinaria y la promoción de la rica diversidad gastronómica de México.