♦ Yolanda Peach | Leche con tuna
Perseverancia, confianza en la calidad que ofrecen, constancia y mucha pasión por la cocina logró, que, en tres años, Samurai Sushi Sake abra su tercera sucursal, ahora en el zócalo de la ciudad.
Es la apuesta de Israel y Diego, dos jóvenes emprendedores, originarios de la sierra oaxaqueña que unieron su talento para abrir un restaurante de cocina japonesa
Cada uno, por su parte, incursionó en el ramo restaurantero. Israel quedó huérfano de padre a los 13 años, lo que lo obligó a salir de su pueblo, Santiago Lachivía Yautepec, Oaxaca para ir a Ciudad de México.
Su intención era estudiar y trabajar. Empezó de mesero, ayudante de cocina, lava loza.
Regresó a Oaxaca donde siguió su recorrido en restaurantes de cocina japonesa. Viajó a Guadalajara donde aprendió mucho de un chef especializado en esta cultura culinaria.
Diego, por su parte, también originario de la sierra oaxaqueña, emigró también de su tierra y llegó incluso a Estados Unidos, donde se especializó en cocina japonesa.
Ambos coincidieron en un restaurante japonés, de donde tiempo después se salieron. Justo en 2020 se reúnen y deciden poner su propio negocio con productos de calidad, platillos preparados al instante y alcance de todos.
Unos guerreros que decidieron nadar contra corriente. Abrieron su primer restaurante un 1 de abril del 2020 (casi al inicio de la pandemia en México), “estábamos a unos días de abrir cuando a nuestros vecinos les empezó a llegar el aviso del municipio de San Agustín de las Juntas que debían cerrar el local”, nos contó Israel.
Obligados a trabajar a puerta cerrada, ofrecieron el servicio a domicilio gratuito, pronto, los empezaron a conocer en la capital oaxaqueña y municipios conurbados.
“Sólo éramos tres, cocinábamos Israel y yo, el otro se encargaba de repartir los pedidos”.
Hicieron un menú con lo que más les gustaba de la cocina japonesa, en los que, los protagonistas principales son el sushi y el sake, bebida de la que en casi todas sus salsas o platillos tienen un toque.
De entradas tienen las gyozas, que son los ravioles japoneses rellenos de carne y verduras; los edamames, vainas de soya hervidas con sal de grano; las kushiages, que son las brochetas empanizadas con salsa agridulce, con queso manchego, plátano o camarón con queso.
Otras entradas son los Yakitori, brochetas asadas con pimiento y cebolla, con res, pollo o camarón; el onigiri, el arroz de sushi relleno de taampico, queso crema y ajonjolí, el boru, arroz empanizado relleno de tampico y queso, salsa kushiage y los nigiris, que son bocadillos de arroz y pescado fresco, ya sea salmón, agún, pulpo, camarón o angula.
“El nombre Samurai Sushi & Sake porque nos identificamos como guerreros, guerreros que luchan por lo que quieren, guerreros que no se dan por vencidos. (…) Me identifica como ser humano, como luchador, como emprendedor”.
Al poco tiempo, el pequeño local era insuficiente, así que rentaron la terraza del hotel María Inés. Al año, abren la primera sucursal en la colonia Reforma, en la calle Amapolas, misma que cerraron para abrir su nueva apuesta, “ahorita después de tres años de esfuerzo y dedicación nos encontramos en el Zócalo de la ciudad de Oaxaca”.
Uno de sus grandes éxitos es el sake, del que, incluso, tienen coctelería que no encontrarás en ningún otro lugar, “manejamos un concepto de mixología japonesa a base de sake, que es el licor japonés, el licor de arroz. Jugos cítricos de temporada oaxaqueña”.
“Los platillos más representativos del restaurante es el ramen, el sushi tradicional, el sushi ya fusionado. Sushi con fruta, sushi empanizados, naturales, capeados y uno de los favoritos son las sopas, las sopas ramen, ramen tradicional, ramen de Rib-Eye, de pollo, filete de res, camarones, mariscos, salmón, de todo, de todo un poco”.
Manejan las sopas clásicas de Japón, como misoohiro tradicional o especial, sumashi soup, torisozui y ramen de pollo, res, rib eye, camarón, mariscos o salmón.
En cuanto a rollos, están los clásicos o conos temakis, los rollos de la casa que son creaciones que se han vuelto favoritos de los comensales.
Están los rollos especiales, los rollos deluxe, los rollos empanizados, los rollos capeados.
Otros platillos son el yakimeshi, teppanyaki, yakuidon, teriyaki, tempura, chirashi, tower samurái y cortes de rib eye, salmón y atún especial.
Los jóvenes emprendedores, saben que es una gran responsabilidad, ya que “son muchos los que dependen de nosotros, hay que pagar rentas, nóminas, ser constante, lo esencial es no desesperarse”.
Su comida ha seducido tanto a visitantes nacionales y extranjeros, como a los locales. Ahora en el Zócalo de la capital, en el portal del Marqués del Valle, tratan de llegar a todos. No solo a los turistas, sino dar la oportunidad a los oaxaqueños para que saboreen la cocina japonesa.
“Han venido personas del pueblo donde soy, han venido a comer les encanta la comida, se sorprenden (…) vienen extranjeros, hay clientes japoneses que nos visitan y que se van con ese gusto, con ese buen sabor de boca porque han probado lo mejor, se sienten identificados, se sienten en casa. Se van muy contentos, nos recomiendan, vuelven a venir”.
Estar en el Zócalo a tres años de abrir su primer local, es una realidad que tal vez no se atrevieron a soñar y que da el ejemplo de lo que se puede lograr con dedicación y compromiso.
