♦ Yolanda Peach | Leche con tuna
“Con la paz de las montañas te amaré. Con locura y equilibrio te amaré. Con la rabia de mis años. Como me enseñaste a ser. Con un grito en carne viva, te amaré…”
Una de las canciones más icónicas de Miguel Bosé llena los espacios del Fonógrafo Café. Algunos escuchan, unos tararean y otros simplemente se sumergen en sus recuerdos.
Recientemente el artista español dedicó esta interpretación en honor a las madres por ser un amor incondicional y pocas veces valorado; sin embargo, pidió que, a pesar de lo que encuentren la verdadera historia detrás de cada canción, conserven los primero que sintieron al escucharla, porque eso es, al final, lo que la hace suya.
Al Fonógrafo Café se llega a pasar momentos realmente agradables, la música está cuidadosamente elegida. Esas melodías que te llegan al alma, que te avivan remembranzas, que te hacen evocar esos buenos tiempos pasados.
La joven encargada del Fonógrafo Café sucursal Santa María Coyotepec nos confío que este lugar nació con la idea de que personas pudieran recordar buenos momentos, “curiosamente, son los jóvenes los que más acuden a este lugar, ahora, a crear bellos recuerdos”.
Recientemente, nos contó, un joven les pidió que lo ayudaran a pedirle la mano a su novia. En un momento dado varios de los jóvenes que forman parte del personal, llegaron a su mesa y llevaron la manta donde le hacía la pregunta formal para pedirle matrimonio.
Esta cafetería cumplió un año recientemente en septiembre, a pesar de no ser la primera, se considera la matriz.
Inició en Zaachila, por cuestiones personales de los que rentaban el local se tuvo que cerrar y es ahí donde se abre la ubicada en Santa María Coyotepec, en la carretera de Oaxaca a Puerto Escondido esquina con la calle 16 de Septiembre, donde abren desde las 4 de la tarde hasta las 11 de la noche todos los días, de lunes a domingo.
¿Qué sería de una tarde memorable sin una buena bebida? Aquí son expertos en café, cuyo aromático traen de Pluma Hidalgo, Tuxtepec y Huautla de Jiménez.
Son varias sus especialidades, como el capuchino, que puede ser solo o saborizado con lavanda, avellana, amaretto, tiramisú, vainilla, nuez de macadamia o crema irlandesa. Latte solo o saborizado, americano, espresso (solo, pana, macciato o romano) y chai.
Bebidas calientes también tienen tisanas de pétalos de rosa con fresa, kiwi-fresa, durazno-mango-piña, arándano-cereza, kiwi-maracuya y moras, té limoncillo, veneciano, chocolate saborizado (rosas, menta, violeta y lavanda) chocolate oscuro, horchata melón y mocha.
Justo ahora, empieza a sonar los Teen Tops, “Nos vemos al ratito allá en el salón. Ponte pantalones pues vamos a volar. Trae a tus amigos y amigas también, ya verás que todos ellos la van a gozar. Te dijeron ya, hay buen rock and roll esta noche”.
Las mesas ya están llenas y los meseros vuelan. Una de las características del lugar es precisamente la rapidez para atenderte. Las comandas salen directo a cada lugar, donde están preparando ya sea las bebidas calientes, las frías, las crepas o los baguettes, de tal forma que tu pedido llega casi al mismo tiempo.
Son 21 jóvenes los que laboran en este lugar, el crepero es, tal vez, el más veloz, prepara su pedido en menos de dos minutos, los más tardados los que utilizan el horno, ahí se tardan cinco minutos.
“Nos tratan como si fuéramos de la familia, como salimos tarde, nos van a dejar hasta la puerta de nuestra casa, no importa si somos mujeres o varones, se aseguran de que lleguemos bien a casa, en general, nos llevamos muy bien entre todos”.
Sobre las bebidas frías está la bebida de la casa, quizá la estrella de la carta. Se llama Rush Tea, está preparada con té frío, trozos de pepino, fresa y un toque de cilandro-
Se pueden pedir sodas italianas, sodas coctel con trozos de fruta, limonadas (lavada, frutosrojos, vainilla), frappés con yogurth griego y tisana, chai, oreo, mocha, horchata-melón, chocolate blanco u oscuro, frapuchino.
Los más intrépidos piden chamoyadas, ya sea de mango guanábana, tamarindo o maracuyá.
En el lugar, todos los días hay música en vivo, puedes escuchar desde las clásicas de Pedro Infante, Juan Gabriel, Vicente Fernández, los Pasteles Verdes.
Y mientras disfrutas los buenos momentos, se pueden saborear sus famosas crepas, con nombres simbólicos. Entre las saladas está Eso y más: con trozos de jamón, elote, vinagreta de mayonesa, galletas saladas y un rogué de chipotle. Adoro, con salsa italiana, queso mozzarella, parmesano y Aderezo de chipotle. Nomás contigo: pollo bañado en la tradicional salsa suiza con queso gratinado. La más pedida es Canción Mixteca: pollo bañado en salsa poblana, con queso gratinado, queso panela y granos de elote.
Las dulces son una verdadera delicia: Querida, con queso crema y zarzamora. Amar y querer, con cajeta, almendra y un toque de rompope. La crepa de los novios, con queso crema, fresa, durazno, lechera, nuez y un toque especial.
Tienen bisquets y waffles. Ciabattas de cochinita, jamón, pepperoni y pollo, que acompañan con papas en hojuelas y chilitos en vinagre.
Tienen una alianza con productores, así que puedes adquirir ahí tus granos de café, bolsas de tizana y mezcal, que por cierto, sus mezcalinas son otro punto a favor, está la mezcalinas de los novios (con fresa, duraznos y frutos de la pasión), tamarindo, maracuyá, fresa, kiwi con maracuyá y mulitas de mezcal.
Un sitio realmente encantador, que te hacer apreciar el tiempo y lo hermoso de vivirlo al máximo, antes de que sea muy tarde. El lugar ideal pasar el rato con buenas bebidas, comida y una música para inmortalizar el tiempo.
“Abrázame que el tiempo pasa y él nunca perdona. Ha hecho estragos en mi gente como en mi persona- Abrázame que el tiempo es malo y muy cruel amigo. Abrázame que el tiempo es oro si tú estás conmigo. Abrázame fuerte, muy fuerte, más fuerte que nunca”.
