Aunado a un proyecto de emprendedores, hablar de Café Rústiko también es contar una historia de amor.
Este sueño, ahora vuelto realidad, lo inicia la joven pareja conformada por Luis Miguel Martínez Montes y Yesby Gutiérrez Carranza, quienes después de un largo idilio se unen en matrimonio.
Los jóvenes, originarios de esta tierra oaxaqueña, deciden probar suerte en Puebla e inician el proyecto desde abajo, hace dos años y medio. Un negocio que saben caminaría poco a poco.
Iniciaron vendiendo postres, ofreciéndolos en distintos lugares, incluso en la calle.
Sus productos son un éxito y los empiezan a llamar para cubrir eventos, después lograron adquirir equipo y logran poner una cafetería en el centro de Puebla, al mismo tiempo se van preparando.
Hacen una gran inversión para remodelar el local, justo en julio del año pasado, 2017 y todo parece marchar como lo anhelaban.
Sin embargo, llegan los terremotos de septiembre y se cuartea el techo. Pese a los esfuerzos por restaurar lo que es un edificio del Centro Histórico de Puebla, deciden abortar y después de pensarlo detenidamente, vuelven a Oaxaca, donde su familia los espera con los brazos abiertos.
Reabren Rústiko en la calle de Independencia 1203, Centro, Oaxaca, entre las calles Libres y Pino Suárez, con el mismo concepto de la barra de café.
Sin olvidar el estilo y fabricando todo con sus propias manos, construyen los muebles, todo de madera, lo que le da un toque exactamente así como su nombre, rústico.
Abren de una de la tarde a nueve de la noche, de lunes a sábado y se ha convertido en un espacio ideal para pasar la tarde.
Precisamente el café que probamos en esta ocasión es el sifón japonés, cuyo sabor es más intenso, con cuerpo, más limpio por su método de inmersión, es más caliente y más vistoso, con diversos tonos de acidez.
Además de ofrecer café brewbar con métodos artesanales, como prensa francesa, chemex, dripper, aeropress, moka y cold brew, cuyo grano lo traen de San Mateo Piñas, Pochutla, lugar que al estar a mil 200 metros de altura sobre el nivel del mar es cien por ciento arábica y su proceso es de lavado, tienen otras bebidas, como las tisanas frutales.
Las tisanas que ofrecen, son infusiones preparadas con base de frutas deshidratadas, flores comestibles, extractos y esencias, sin aditivos, cafeína, conservadores, ni colorantes artificiales.
Son tisanas cien por ciento mexicanas, con un alto porcentaje de frutas para disminuir la acidez, con nombres como La Huerta, Paraíso, Ixil, Locotepec, Kalakmóli, Azoyú, Grasave, Paso de ovejas e Irapuato.
No han dejado los postres y también tienen alimentos salados. Todos los insumos son productos de buena calidad y comprados a proveedores locales.
Todo el conjunto, tanto el lugar, las bebidas y alimentos, como la atención, hacen de Rústiko un ambiente saludable.
Si quieres olvidarte del celular, puedes tomar algunos de los juegos de mesa, si no, tienen wifi, muchos ocupan el lugar para trabajar, otros, para jugar un rato e incluso ver sus series.
“Puedes darte la oportunidad de probar algo diferente y pasar un buen rato disfrutando cosas ricas, todo se hace con amor y se nota”, comenta Luis Miguel.
Definitivamente Café Rústiko es un lugar en el que desearás quedarte un buen rato y del que no dudarás en regresar, amagando con convertirse en uno de tus favoritos.