Si quieres vivir la cultura de Oaxaca en todo su esplendor, hay un rinconcito, en el centro de la ciudad, que debes visitar. Se trata de La Casa del Artesano.
Es una oportunidad increíble para rodearte de todo el calor de Oaxaca, hallarás desde piezas de todas las regiones del estado, técnicas, arte aprendido de generación en generación, cocina tradicional oaxaqueña y deliciosos postres.
Evocar a Oaxaca y a su multicolor cultura se puede transformar en algo tangible. Se trata del arte que nace del alma de cada pueblo para formar parte de su expresión cultural.
La Casa del Artesano es un colectivo de reciente creación. Inició operaciones el pasado mes de marzo de 2019. Se ubica en Rayón 405, en el centro de Oaxaca.
Anteriormente, a través de intermediarios, es que podían ofrecer sus productos o en sus propias comunidades, lo que dificultaba su comercialización y en el primer caso, incrementaba el precio al llegar al comprador.
“Antes sólo a través de las ferias que organiza el gobierno estatal, que son muy contadas, dos o tres veces al año, es que los artesanos podíamos tener contacto directo con las personas interesadas en nuestro arte”, nos comentó una de las fundadores.
En este colectivo se unieron artesanos, productores y diseñadores originarios de las ocho regiones del estado.
Aquí puedes encontrar bordados del Istmo, el textil del gusano de seda de Pinotepa de Don Luis, los huipiles, antiguos, de gala y de punto de cruz de San Felipe Usila, las blusas chenteñas o camisas para caballero en punto de cruz de Vicente Coatlán.
Y en artesanías, trabajos de palma ancestrales, bolsas de tintura sintética; o la filigrana oaxaqueña, con modelos tradicionales y modernos de Ejutla de Crespo
Una de las galerías que adornan este lugar, es la de Manuel Jiménez, creador de las tallas de madera, que es la única en Oaxaca.
Se les dio espacio a dos artistas plásticos, Luis Fernando Jiménez de Pinotepa de Don Luis y Diego Hernández.
En cuanto a gastronomía, está Los guisados de mi pueblo, con un cocinero tradicional.
Puedes encontrar desde caldo de piedra, de San Felipe Usila, así como memelas, tlayudas rancheras, entomatadas, chilaquiles y un menú del día.
Si se trata de snacks, ofrecen alitas y costillas. La diferencia a otros lados, es que las preparan como animales de granja y todo es orgánico.
Café de especialidad de la cañada oaxaqueña, es una de las bebidas, así como el mezcal Valle de Oaxaca, de Santiago Matatlán.
Y de postre, nada como una nieve tradicional. Nevería La Oaxaqueña, una empresa familiar con más de cuatro generaciones en el Estado, es la que integra esta peculiar unión de artesanos auténticamente oaxaqueños.
Definitivamente, si quieres adquirir productos de calidad, al precio directo con los artesanos, debes visitar La Casa del Artesano, a la par de disfrutar de la deliciosa comida oaxaqueña. Un lugar imperdible en tu visita a esta bella ciudad.