La de Abraham Sánchez es una historia que apenas inicia, pero avanza de forma vertiginosa en el mundo de la gastronomía.
Tan sólo tiene cuatro años que terminó sus estudios profesionales y ya ha trabajado en la Ciudad de México, en Huatulco, fue jefe de cocina en los Danzantes durante tres años y ahora está a cargo de la cocina en Casa Mayordomo.
Desde que llegó a Casa Mayordomo encabezó la revolución en los platillos, ahora con más vanguardias, respetando la tradición, pero con montajes y técnicas de fusión.
“Se trataba de la cocina tradicional oaxaqueña, todas con las raíces en Oaxaca y sobre todo, utilizando el mole Mayordomo (tenemos cinco de los moles), así que sin salirse de lo tradicional, cambiamos el montaje”, revela.
Y no sólo logra que el platillo se vea más estético, sino una fusión de sabores que le da un toque más universal.
Confiesa que los extranjeros son más reservados para comer, les da temor la leyenda mexicana de que todos los platillos son picantes, tienen miedo de un sabor ajeno a su paladar, sin embargo, tras atreverse a probarlos, aprecian el sabor.
A Casa Mayordomo la mayoría de visitantes son comerciantes locales, tal vez uno de cada cuatro sean extranjeros, y el resto son visitantes nacionales.
Abraham Sánchez ha decidido introducir en el menú opciones para todos, como la ensalada de pollo y las verduras al grill para veganos y vegetarianos, todos, platillos vanguardistas, como la pechuga a la oaxaqueña, rellena de quesillo con champiñones y bañada de mole Mayordomo, o el chile Mayordono, una de los platillos estrellas de la casa, la crema de esquite, la sopa Istmo o el puré istmeño.
Entre sus postres, destaca la Panacota de téjate, con una producción de coco rallado, el pastel de leche quemada con tuna.
“Antes la comida que ofrecían era muy básica y austera, lo tradicional. (…) Espero dejar una pequeña diferencia entre lo que era antes y que sea un punto de encuentro.
Así, Abraham Sánchez, con poco tiempo en el mundo de la Gastronomía ya está dejando huella, ya empezó por imprimir su estilo hasta hacer la cocina completamente suya.
