¿Te sobró comida y no sabes qué hacer para no desperdiciar? Puedes transformarla en una cocina creativa y barata. Te vamos a dar algunos tips para aprovechar las sobras.
Los restos de verduras o legumbres pueden transformarse al día siguiente en una crema.
Si te sobra carne, pescado o pollo cocido, se pueden preparar croquetas, empanadas, rellenar pimientos, dar más sabor a un caldo o a la sopa o incluso para una ensalada.
Con la fruta que quede se pueden hacer licuados con leche, agua refrescante o prepararlas en almíbar.
Si sobra alguna salsa, se puede congelar en pequeñas porciones, de forma que sólo descongeles lo que necesites consumir, como para acompañar espagueti.
Si sientes que los huevos están a punto de caducar, se pueden cocer, picar e incluirlos en ensaladas, sopas o cremas. Otra idea es revolverlos con restos de verduras, carnes o pescados.
El yogur se puede utilizar para hacer salsa y aderezo para ensaladas.
El pan del día anterior tiene mil y una vidas, se puede convertir en unos crutones para el puré o para una ensalada.
Si se preparó pasta o arroz aparta lo que no vayas a comer y guárdalo en un traste en la nevera. Es perfecta para hacer ensaladas o como guarnición de la carne o el pescado.
Los tomates también se pueden congelar. Cuando estén a punto de pasarse, guárdalos en el congelador, aunque antes deberás escaldarlos durante 10-15 minutos en agua hirviendo y después pelarlos. Servirán para todo tipo de salsas calientes en platos tan ricos como arroces, pistos, pastas, pescados como el bonito o la carne en tacos. No perderá ni una de sus propiedades.
Las papas cocidas puedes hacer un buen puré al modo más tradicional, ensaladas camperas, ensaladilla rusa, tortillas o como acompañamiento.
